El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, aseguró que la organización yihadista Estado Islámico (EI) tiene presencia en el Estado judío y prometió «mano dura» para combatirlo.
«El Estádo Islámico ya está aquí, ya no es ningún secreto», dijo el mandatario durante su intervención en la conferencia anual del Instituto para Estudios de Seguridad Nacional de Tel Aviv, en la que abordó la amenaza y presencia del mencionado grupo yihadista y sus efectos sobre la sociedad y en la geopolítica de Oriente Medio.
«No estoy hablando de los territorios que rodean al Estado de Israel, sino de Israel», aclaró Rivlin, y aseguró que diversas investigaciones revelan un aumento del apoyo al EI entre los árabes con nacionalidad israelí.
Según el presidente, en los últimos años algunas comunidades beduinas, fundamentalmente situadas al sur del país, viven un proceso de radicalización, mientras que las ciudades árabes del norte de Israel se muestran cada vez más abiertas a la implementación de la sharía (ley islámica).
«Incluso entre seculares vemos ondear la bandera negra del EI» durante manifestaciones y concentraciones políticas «en las que participan algunos miembros del Parlamento israelí», denunció.
Rivlin señaló que mientras la simpatía por el grupo islámico radical aumenta también en las redes sociales, «más y más individuos moderados se sienten amenazados; sienten que la tierra se abre bajo sus pies».
El líder rechazó que el fenómeno sea causa del conflicto entre israelíes y palestinos o resultado de la ocupación de Cisjordania, y pidió responsabilidad a la comunidad árabe en Israel a la hora de condenarlo y rechazarlo.
«Estamos en un momento estratégico» en el que hay que apostar por la integración del sector árabe en el país, e insistió en que Israel «no lo considera como un enemigo».
Rivlin aseguró que hay un camino «largo y difícil» por delante para combatir al EI en el que las fuerzas de seguridad e inteligencia «desempeñarán un papel clave».
«Los servicios secretos y la policía deben intensificar sus capacidades entre la comunidad árabe, y asolar a los extremistas y tratarles con mano dura», consideró Rivlin, que también indicó que en la lucha contra el extremismo, «no debemos caer en la tentación de pensar que las fuerzas de seguridad solas son suficientes».
«Debemos trabajar en devolver el sentido de confianza entre las poblaciones árabe y judía, entre la población árabe y el sector público, y la confianza exige escuchar, invertir, voluntad y compromiso», advirtió.
19/01/2016 en ISRAEL EN LINEA.
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