lunes, 22 de abril de 2019

Deberán cruzar el río Jordán.


Llevamos ya varias décadas escuchando decir a los árabes y en particular a los árabes palestinos que echarán a los judíos al mar. Tal afirmación siempre me ha causado cierta extrañeza, porque lo que ahora llamamos Palestina nunca fue una nación árabe, pero sí fue la nación de Israel por muchos siglos. De hecho siempre ha habido allí presencia continuada de judíos por más de 3.000 años.

Cuanto más les escucho decir que quieren empujar a los judíos al mar, menos fuerza veo que tienen para hacerlo.

Creo que tras sententa años del nuevo Estado de Israel y quizás otros tantos antes de lucha hasta su constitución en 1948, viene siendo hora para que los árabes palestinos dejen de empujar en ese sentido y empiecen a usar esa fuerza de una forma más productiva.

Israel ya es un estado consolidado, que ha tenido que luchar en varias ocasiones por defenderse frente a todos los pueblos árabes que lo rodean. Cada una de las guerras de defensa ha permitido consolidar mejor sus fronteras y en cada momento ha demostrado su firme deseo de negociar la paz con cada uno de sus vecinos.

Sin embargo, los árabes palestinos nunca han querido negociar en serio, porque su objetivo siempre ha sido echar al pueblo judío para quedarse con todo el territorio. 

Estamos viviendo los días de la Pascua, donde podemos recordar como Dios liberó a su pueblo de la esclavitud de los egipcios a través de Moisés. Egipto lo hizo tras sufrir las 10 famosas plagas que Dios les mandó para su destrucción.

Los árabes palestinos dicen estar viviendo una situación similar de "opresión israelí", pero siguen sin encontrar al lider que los liberen. Mientras tanto, las plagas siguen cayendo sobre ellos mismos, que les conducirán seguramente a su destrucción. Veamos algunos ejemplos.

* Donald Trump, calcelando todas las ayudas de Estados Unidos para la Autoridad Palestina y para la UNRWA.
* Jared Kushner y su Plan de Paz para toda la región, donde seguramente no se contemplará la opción de Dos Estados.
* La mano dura de Netanyahu y su deseo de anexionar a Israel todos los asentamientos en Judea y Samaria tras las elecciones de hace unos días.
* El traslado de la Embajada de Estado Unidos a Jerusalén por Donald Trump y el reconociendo de los Altos del Golán como territorio israelí.
* El aislamiento internacional creciente, incluso por paises árabes como Egipto y Arabia Saudí.
* Las nefastas consecuencias económicas para los árabes palestinos por la campaña del BDS contra Israel.
* La falta de libertad de movimiento hacia Israel por las continuadas acciones de terrorismo realizados por ellos contra los israelíes durante todos estos años.
* Los descubrimientos arquelógicos, que de forma contundente demuestran la presencia israelí por más de 3.000 en todo el área de Canaan y más allá del Jordán.
* Y otra plaga más son sus propios gobernantes corruptos, que por años han robado los recursos que la Comunidad Internacional ha dado para su desarrollo de su pueblo.

Parece que con toda esta situación no les queda otra opción a los árabes palestinos que salir de Judea y Samaria para ir a su tierra de promisión. Desde 1922 ya tienen a Jordania para ellos. La Liga de Naciones ya dió en ese año a la Palestina oriental para los árabes palestinos.

Parece irónico, pero es más que probable que de no empiezar a negociar de una vez y en serio con el Estado de Israel, tendrán que salir para cruzar el Jordán o ir para cualquier otro pais árabe vecino.

Cruzar el río Jordán es seguir estando en Palestina tal y como quedó recogido inicialmente en el Mandato para Palestina de 1922.

¿Echarlos al mar o empujarlos al río Jordán? En estos momentos no cabe duda que de no haber acuerdo, muchos tendrán que cruzar el río si desean vivir en paz una nueva vida. No creo que queden muchas más oportunidades.

Feliz Pascua y ojalá esté cercano el día que puedan vivir todos en paz, armonía y libertad.


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22/04/2019




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