La entrega de sistemas antiaéreos rusos S-300 a Irán cambiará radicalmente el equilibrio de fuerzas en Oriente Medio, afirma el periodista del sitio Business Insider, Jeremy Bender.Según él, la entrega de S-300 conllevará una doble ventaja para Teherán: Irán podrá controlar el espacio aéreo lejos de sus fronteras y proteger sus instalaciones nucleares.
En virtud de un acuerdo firmado en 2007, Rusia entregará a Irán misiles S-300 versión PMU-1 dotados de un alcance de 150 km y capaces de abatir un avión o misil de crucero que vuele a una altitud de 28 kms.
Si Irán despliega esos misiles en su costa sur, esto le permitirá estar al corriente del despliegue todo avión norteamericano de sus bases aéreas situadas en la región del Golfo Pérsico, indicó el periodista.
Según Bender, la entrega de los S-300 impedirá un ataque militar contra las instalaciones nucleares iraníes. EEUU podría ser capaz de llevar a cabo estos ataques, pero la presencia de estos misiles haría una operación tremendamente complicada y costosa, según el autor.
El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó a mediados de abril el decreto que levantaba la prohibición de entregar misiles S-300 a Irán. La ejecución de tal acuerdo, firmado en 2007, había sido suspendida en 2010 por el presidente ruso de la época, Dimitri Medvedev, que se sometió a las presiones occidentales.
Se espera la entrega de los misiles a Irán este año, según afirmaron fuentes de ese país.
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