Pablo Iglesias Foto Maxresdefault
El partido político “Podemos” que integra el gobierno considerado de izquierda de España, es el único partido político en un país democrático y no musulmán que tiene estrechas relaciones con la teocracia iraní y es el único partido en el mundo que comparte abiertamente su virulenta política antisemita.
Recientemente buena parte del mundo civilizado recordó el 75 Aniversario de la irrupción de las tropas aliadas en el campo de exterminio nazi de Auschwitz. Casi simultáneamente, 58 gobiernos locales en España dominados por “Podemos” tomaron una medida de boycott contra instituciones, compañías, grupos artísticos o sociales judíos o israelíes, que recordó el boycott nazi a los negocios judíos del 1 de abril de 1933, históricamente una especie de prólogo del Holocausto.
Para quienes de una manera tienen conciencia histórica o han sido víctimas directas del nazismo, la asociación es evidente. Asimismo es evidente el paralelismo de los propósitos de destrucción del estado de Israel repetidos hasta el cansancio por dirigentes religiosos, políticos y militares de Teherán, con el furibundo antisemitismo de Hitler.
Felizmente España es un estado de derecho ejemplar y las medidas discriminatorias claramente antisemitas de “Podemos” han sido declaradas ilegales en muchos ayuntamientos por la justicia española. Pero en donde no se plantearon quejas legales, las medidas siguen teniendo vigencia. Es un hecho sumamente inquietante que integre el gobierno de una gran nación europea un partido auto-designado “izquierdista” y partidario de una presunta “justicia social”, pero aliado al régimen teocrático-militar iraní, que amenaza con el genocidio al único país judío en el mundo. No es un secreto para nadie que el régimen ultra-conservador y tiránico de Teherán oprime a su pueblo y solo permite votar y presentar sus candidaturas a los fieles a su régimen. La relación de “Podemos” con Irán nos revela hasta qué punto la democracia en el mundo está amenazada por fuerzas disolventes y hasta qué punto se ha deteriorado la ética en la vida política de gran parte del planeta, convirtiendo los planteos ideológicos en una patética burla cuando hay intereses políticos y materiales de por medio.
Si bien hay en España vigorosas fuerzas democráticas, comenzando por la realeza, la presencia en su gobierno de un partido apoyado por el régimen clerical-militar constituye un grave peligro para su libertad. Lamentablemente en el siglo pasado hemos visto demasiados casos de países en los cuales la democracia ha sido destruida por fuerzas políticas que contaron con apoyo de poderosos factores externos. Por lo demás, ya es hora de que España y el mundo comprendan que la existencia de Israel es una especie de seguro para la democracia, el progreso científico y cultural y en un sentido más amplio para la continuidad de la civilización occidental. Parafraseando al gran poeta peruano César Vallejo “ Si cae Israel, digo, es un decir, si cae, su caída llevará a la derrota de la democracia en el mundo.”
25/02/2020 en POR ISRAEL
No hay comentarios:
Publicar un comentario