Hace unos días estaba leyendo algunos artículos en relación a los Acuerdos de Oslo, donde se analizaba en detalle el fracaso tras 25 años desde su firma.
Lo que supuso la esperanza de una paz definitiva, no ha hecho más que enquistar y eternizar el conflicto.
El primer acuerdo de Oslo, que supuso la autonomía de Gaza y Jericó, dio paso al segundo con la esperanza de que permitiría llegar a un acuerdo total incluyendo los temas más espinosos (Jerusalén, los refugiados árabes palestinos, los asentamientos de colonos judíos, las fronteras, etc.), para terminar definitivamente con este conflicto.
Hemos sido testigos del estancamiento de las negociaciones a los pocos meses de su firma. Pero no sólo eso, porque además pudimos ver que de ninguna manera se conseguirá avanzar más, porque los árabes palestinos tienen como único objetivo la eliminación del sueño sionista en toda su extensión.
La Declaración Balfour, el apoyo de la Liga de las Naciones, el Mandato británico para Palestina, la Comisión Peel, la resolución de las Naciones Unidas para la partición en dos estados, han supuesto una sucesión de eventos que han confirmado desde un principio el derecho de los judíos a tener su Estado en Palestina.
La cuestión es, ¿por qué nunca ha habido un deseo sincero de los árabes palestinos por encontrar una solución negociada?
En estos momentos con el nuevo Plan de Paz de Trump, tenemos otra oportunidad encima de la mesa para una paz completa. Como era de esperar la Autoridad Palestina no ha hecho nada por participar en este nuevo plan.
Se esperaba que Israel aplicaría a partir de ayer día 1 de julio la soberanía sobre el Valle del Jordán y otras zonas de hasta el 30% de las tierras en disputa (conocidas como Judea y Samaria o Cisjordania), para presionar a los árabes palestinos, pero no se ha producido todavía a fecha de hoy por la presión internacional, pero sobre todo por las horas bajas de sus principales actores (Trump, Netanyahu y Gantz).
Confiamos en la genialidad e inteligencia del gobierno israelí, para aprovechar la ocasión y poder seguir avanzando aunque sea sin la colaboración de sus vecinos palestinos.
Se avecinan tiempos revueltos en la zona e Israel necesitará afianzar sus fronteras, reforzar su seguridad e ir solucionando definitivamente este capítulo oscuro de su historia, para ayudar a sus vecinos árabes sunitas a luchar contra el terror iraní en todo el Oriente Medio.
Tendremos noticias en los próximos días. De eso no hay duda.
02/07/2020 Comentarios personales.
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