El pasado 15 de mayo el “expresidente”(*) Mahmoud Abbas habló en una sesión especial del Comité de la ONU, con motivo del 75 aniversario del “Día de la Nakba”, que en árabe significa “Día de la Catástrofe”. Su intervención estaba cargada de mentiras.
Al igual que la legitimidad de su cargo, sus afirmaciones eran en su mayoría un conjunto de incorrecciones y mentiras, que no logro entender como a estas alturas se sigue permitiendo en lugares como las NACIONES UNIDAS.
Es cierto que fueron muchos los desplazados con motivo de la guerra de independencia de Israel durante 1948-49, pero debemos recordar que no fueron sólo árabes palestinos. De forma casi simultánea, la mayoría de los judíos de todos los países musulmanes fueron expulsados de sus hogares, sin poder mantener tampoco sus propiedades y eso también fue otra “catástrofe”. Y todo ello, a pocos años del final de la segunda guerra mundial, donde también se produjeron millones de desplazados por todo el mundo.
Fue una autentica catástrofe en ambos lados, con la diferencia de que los refugiados judíos fueron atendidos por Israel y muchos otros países occidentales, mientras los refugiados árabes palestinos, no fueron atendidos por sus propios hermanos musulmanes.
Dicen que no hay más ciego, que el que no quiere ver y ese es el caso del fanatismo árabe palestino.
Veamos con más detenimiento algunas de las mentiras expuestas por el “expresidente” Abbas.
1.- Abbas niega los lazos judíos con el Monte del Templo.
El que actualmente no exista un templo en la explanada, no significa que no lo hubiera en el pasado. La arqueología, la historia, la Biblia y la propia tradición judía nos lo muestra muy claramente. Existen pruebas más que evidentes de la vinculación por más de 3.000 años de los judíos con el Monte del Templo, con Jerusalén y con toda la tierra de Israel incluyendo Judea y Samaria, así como en otras zonas de alrededor.
Por la arqueología y la historia sabemos que durante muchos siglos los musulmanes dominaron gran parte de la península ibérica. De forma que podemos afirmar que estuvieron entre nosotros y aunque tuvimos vínculos culturales con ellos, esa época pasó porque progresivamente reconquistamos nuestra tierra hasta que al final fueron “expulsados al mar” cuando cayó el Reino de Granada en 1492. Fueron expulsados y ya no volvieron nunca más.
El caso del pueblo judío es diferente porque su vinculación con la tierra de Israel es de más de 3.000 años y abarca por lo menos toda la tierra desde el río Jordán al Mar Mediterráneo. Es cierto que en el año 70 de nuestra era fueron expulsados por el imperio romano y que han sufrido una larga y dura diáspora, pero nunca ha dejado de haber población judía allí durante todo este tiempo en su tierra ancestral.
Es cierto de que se hicieron algunas excavaciones en el Monte de Templo, sobre todo a finales del siglo XIX, pero a diferencia de lo que dice Abbas todas ellas sirvieron reafirmar el vínculo del pueblo judío con Jerusalén y el Monte del Templo.
Sin embargo, los árabes sólo han estado presentes durante los últimos 7 u 8 siglos. Nunca ha existido un país árabe allí, ni Jerusalén ha sido jamás capital de ninguna nación Árabe. No ha existido el pueblo árabe palestino en esa zona, en los términos que quieren que creamos. La historia y la arqueología lo demuestra igualmente con mucha claridad. Los árabes originalmente son de Arabia y su expansión a toda esa zona es relativamente reciente. Basta con dar una ojeada por la Wikipedia.
En su discurso enfatizó ser propietarios no sólo del Monte del Templo, sino también del Muro de las Lamentaciones como parte del mismo. Yo me temo que los musulmanes siguen sin ser conscientes de que no son dueños de nada. Tan sólo tienen concedido el derecho al uso para los servicios religiosos, porque al fin y al cabo toda Jerusalén es la capital del Estado de Israel. Una cosa es la libertad de culto y otra es la soberanía que ya todos sabemos que es de Israel.
En este punto Israel sigue respetando lo descrito en la Declaración de Balfour, donde el Reino Unido tiene a bien ayudar a que los judíos a que tengan un hogar nacional en Palestina, sin detrimento de los derechos civiles y religiosos de todos aquellos que estén allí también, como es el caso de los musulmanes. Derechos civiles y religiosos no es soberanía ni tampoco propiedad.
También el “expresidente” Abbas volvió a afirmar que Israel les ha negado a los árabes palestinos la libertad de culto en el recinto de las mezquitas. Yo no lo creo así. Lo que creo es que les niega hacer destrozos o que se hagan daño entre ellos mismos y tampoco permitirá nunca que les haga daño a los judíos que puedan estar orando justo abajo en el Muro. Esto es lo normal en cualquier otro lugar del mundo civilizado y por tanto también en Israel.
Si las fuerzas policiales han tenido que entrar, como ha pasado en los últimos años durante el mes del Ramadán, es porque no ha habido más remedio. Con sus intervenciones han evitado males mayores, aunque es cierto que quizás podrían haber sido un poco menos contundentes.
La libertad de culto está asegurada y nunca ha estado en riesgo y los árabes palestinos lo saben perfectamente. Sólo usan Al-Aqsa como escusa para movilizar a sus fanáticos radicales.
Balfour sigue presente aún hoy en día y es lo que les ha garantizado hasta ahora la libertad de culto a los musulmanes en sus territorios autónomos y también en toda Israel, incluyendo Jerusalén y la explanada de las Mezquitas. Por más que estuvieran allí los Templos judíos en el pasado, tienen garantizados la libertad de culto hasta hoy, por más que hagan creer lo contrario.
2.- Abbas dice que Israel actua de forma similar a los nazis.
Porque Amin al-Husseini (antiguo Mufti de Jerusalén) fuera un más que simpatizante de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial y al “expresidente palestino” le cueste aceptar el Holocausto, no por ello las acciones del Estado de Israel pueden calificarse de nazis.
Israel no tiene actitudes nazis, porque si fuere así no permitiría un 20% de árabes israelíes en su país, con los mismos derechos y obligaciones que el resto de la población.
Las actitudes nazis están dentro del propio gobierno de la Autoridad Palestina y de las zonas donde ellos gobiernan, porque no quieren la presencia de ningún judío en toda esa tierra, como tampoco las hay hoy en día en toda Gaza.
Los israelíes salieron de forma voluntaria de Gaza, pero nunca lo harán de Judea y Samaria. Difícilmente podrán renunciar a ciudades como Hebrón, Silo, Belén, Jericó, etc. Aunque llegado el caso, sé que estarían dispuesto a realizar nuevos y difíciles sacrificios si con ello se consiguiera la paz definitiva.
Recuerdo con mucho dolor los tiempos donde el terrorismo de ETA condicionaba la vida de toda España. Vivimos años muy duros, y teníamos casi a diario atentados por toda España, pero particularmente en Madrid y en el País Vasco. Aunque eran muy localizados, todos nos veíamos afectados y eramos conscientes de que la solución pasaba por el final de los atentados y la entrega de las armas de los terroristas de ETA.
Los árabes no quieren la solución de los Dos Estados, porque nunca se han planteado entregar las armas. Han basado su vida en el terror y saben que no son capaces de construir su propio país. Por eso siguen con los atentados.
Además la Comunidad Internacional se lo permite, comprando su narrativa y financiando su sistema de desgobierno y mentiras.
3.- Los Dos Estados.
¿Cuándo nos enteraremos que el “expresidente” Abbas no quiere la solución de los Dos Estados?
Desde los Acuerdos de Oslo en 1993 donde se constituyó la Autoridad Palestina, los árabes palestinos gozan de autonomía y de autogobierno en gran parte del territorio que se encuentra todavía en negociación y disputa, a la espera de que algún día se le ocurra a los líderes árabes palestinos sentarse para terminar la negociación.
Durante estos días estoy leyendo en la Biblia la historia del Rey Salomón. En su vida encuentro muchas enseñanzas interesantes para mi vida, pero igualmente veo paralelismos con el conflicto palestino-israelí. Hay un pasaje dónde 2 prostitutas fueron a ver a Salomón para reclamar la vida de un bebé. La madre que mentía estaba dispuesta a que Salomón partiera en 2 al niño con tal de “satisfacer a ambas mujeres”, aunque muriera el bebé, mientras que la verdadera madre con tal de que viviera el niño, prefería darlo entero a la mujer mentirosa.
Es justo lo que pasa con los árabes palestinos, porque ellos prefieren la destrucción de todo antes de que Israel pueda seguir viva. Para solucionar este conflicto necesitamos encontrar a un nuevo Salomón con suficiente sabiduría de Dios.
4.- El desierto no ha florecido con la llegada de los judíos.
Dice que el desierto no está floreciendo desde la llegada de los sionistas a Palestina. Pues otra mentira más de este hombre. No sólo ha florecido de una forma espectacular, sino que además el Mar de Galilea está casi rebosando. Jamás se tuvo tanta reserva de agua como ahora
Es el único país del mundo que cada año aumenta su superficie de arbolado. Así es, cada año aumenta y sigue aumentando.
En el tratado de paz con Jordania, Israel se comprometía a la entrega una cantidad importante de agua. En la actualidad ya les entrega 4 veces la cantidad pactada de inicio.
Y la superficie de cultivo aún en el desierto también aumenta sin parar, a pesar de los problemas que presenta la Autoridad Palestina y Gaza en la gestión de las aguas residuales.
También en la gestión de las aguas son un desastre los árabes palestinos. Pero no importa, porque parece que también es culpa de Israel que los árabes palestinos no cuiden el medio ambiente.
5.- Estado Unidos y el Reino Unido fueron responsables del desplazamiento de cerca de un millón de palestinos durante la guerra de 1948.
Me parece que la memoria le está fallando a este pobre hombre, porque los responsables fueron los países árabes. Fueron ellos quienes iniciaron la guerra. Israel sólo declaró su independencia y los países árabes respondieron con la guerra. Pero además, invitaron a que salieron los árabes palestinos para poder hacer mejor la guerra contra los israelíes.
Reino Unido no podía más con el Mandato Británico en Palestina y por eso tras la aprobación de la partición por parte de la ONU, decidió dar por cancelado el Mandato y salir de allí lo antes posible y con el rabo entre las piernas.
Al ver que se quedarían solos, los judíos no tuvieron otra opción más que declarar la Independencia, aunque su futura nación fuera sobre un territorio tan pequeño. Y los árabes palestinos también tuvieron la oportunidad de ser una nación, pero no lo hicieron. En su lugar, le hicieron caso a sus hermanos árabes para ir a la guerra contra los judíos. Esa fue la verdadera “Nakba” para ellos y no los desplazados.
Estados Unidos y el Reino Unido no participaron en la guerra y por tanto no fueron responsables de los desplazados árabes palestinos. Es otra mentira intencionada que el “expresidente” Abbas dijo ante toda la ONU.
El Reino Unido se encontraba en un momento crítico tras la Segunda Guerra Mundial y ya no era la Potencia Colonial de antaño. Por otro lado, los Estados Unidos no estaba presentes en la zona por aquella época. Ellos entraron en escena mucho más tarde y de una forma muy diferente a los británicos.
Abbas decía que querían deshacerse de los judío para beneficiarse de su presencia en Palestina. Yo creo que no tanto beneficiarse, sino más bien para hacer justicia después de tantos siglos fuera de su tierra y quizás también para asegurar en Palestina la posibilidad de una nación viable, de la misma forma como ya se había hecho en Irak, Jordania, Siria y Líbano.
6.- Los primeros sionistas afirmaron falsamente que Palestina era una tierra sin gente.
Bien en parte tiene razón, porque antes de ellos ya lo decían aquellos viajeros que visitaban la tierra. Todo aquel que llegada a Palestina al final del siglo XIX y principios de XX se sorprendía de la poca gente que habitaba la tierra; de lo abandonada que estaba; de los pocos recursos hídricos y de las innumerables enfermedades por la infinidad de aguas estancadas que se encontraban por toda la zona en los últimos años del Imperio Otomano.
Era una tierra donde no se podía vivir y por tanto los primeros sionistas también dijeron lo mismo a su llegada. De todo esto hay también sobrada bibliografía y está más que demostrado que los sionistas cambiaron toda esa tierra inhóspita en una tierra habitable, que permitió no sólo la llegada de una multitud de judíos sionista, sino también de más árabes de los países de alrededor.
7.- Los árabes palestinos eran descendientes de los cananeos.
El pueblo cananeo fue un pueblo muy antiguo según podemos ver en la historia y la arqueología en lo que actualmente llamamos Palestina. Los judío también es un pueblo casi tan antiguo allí y lo sabemos también por la historia y la arqueología. Pero de los ahora llamados “palestinos”, ni la historia y ni tampoco la arqueología dice nada de ellos, por más que se esfuerce el “expresidente” Abbas.
Tampoco la Torá dice en ningún lado como él mismo manifiesta, que los cananeos fueran árabes o que los árabes fueran los cananeos. Creo que debería leer un poco más la Torá. Nunca se sabe lo que uno puede aprender de ella.
Lo cierto es que a los romanos se les ocurrió llamar Palestina en el año 135 de nuestra era, a lo que entonces era la provincia de Judea. Fue un término despectivo para los judíos. Por tanto, los primeros palestinos fueron los judíos del siglo II de nuestra era. Y ese nombre viene de los antiguos filisteos. Los filisteos fueron extranjeros provenientes de los pueblos del Mar Egeo. Su significado en hebreo significa extranjero. Pensad por un momento lo divertido que puede llegar a ser para un judío escuchar de un árabe decir que ellos son los “extranjeros” (palestinos).
Imaginaros por un momento que Hitler hubiera ganado la Segunda guerra Mundial y se hubiera quedado con toda Europa y que a toda la península ibérica la hubiera llamado Portugal. Sería un gran insulto para nosotros los españoles. Bien, pues eso mismo fue para los judíos del siglo II.
Ya no se utilizó nunca más ese término hasta que el Reino Unido por mandato de las NACIONES UNIDAS estableció el Mandato Británico en Palestina.
8.- Dice que es mentira que Israel es el único estado democrático en Oriente Medio.
Alguien que no convoca elecciones y no se va de su cargo a los 4 años como es el caso del “expresidente” Abbas, difícilmente puede dar clases de democracia.
Dice que es un oxímoron que Israel mantenga la ocupación y ser una democracia a la vez. Pero no es así, porque Israel es una democracia dentro de sus fronteras. La situación de Abbas en las tierras en disputa si que es un oxímoron, porque dice ser presidente de los árabes palestinos y a la vez hacer responsable a Israel de su propio desgobierno. Israel es sólo responsable de su propio estado.
En los Acuerdos de Oslo de 1993 se acordaron con los árabes palestinos los primeros pasos para su autogobierno, para culminar en 5 años con la solución de los Dos Estado. Israel aceptó con mucho dolor tales acuerdo, pero el tiempo ha demostrado de que los árabes palestinos nunca desearon llegar a ser un estado. Sólo desean la destrucción de Israel y hacerse con todo el territorio.
Se escudan en la negociación sobre la bases de las fronteras de antes de la guerra de 1967, pero eso es algo que no podrá ser jamás. Lo vigente en la actualidad, por más que les pese son los Acuerdos de Oslo.
De seguir así, llegará el día donde no podrán pedir nada y tampoco la Comunidad Internacional les podrá seguir apoyando.
9.- Pidió el derecho de retorno de los refugiados palestinos.
En primer lugar habló de la Resolución 181 de 1947. Pidió que se cumpliera el plan de partición de Palestina. Israel ya cumplió su parte en 1948 y en todo caso el “expresidente” Abbas no puede exigir a los demás de lo que ellos mismo no hicieron en su momento. No lo hicieron en 1948 porque realmente querían toda Palestina y libre de judíos. Esa Resolución ya quedó atrás y no se puede volver a ella..
Pidió que se cumpliera también la Resolución 194. De los 750.000 árabes palestinos que salieron en 1948-49 seguramente no queden vivos más de 50.000. No creo que Israel tenga problemas por asimilar los que queden vivos hoy en día y que correspondan a su territorio dentro de sus fronteras, si la Autoridad Palestina también cumple con los que le corresponderían en sus propios territorios.
Pero de igual manera, la Autoridad Palestina tendría que aceptar a los judíos que vivían en los territorios que ellos controlan y que vivían allí antes de 1948, que podrían ser unos cuantos de miles también. No creo que Abbas acepte esa solución, porque él sólo habla de la parte que le interesa y no en término de miles de refugiados sino de millones de refugiados.
Ninguna guerra anterior en el mundo ha considerado nunca refugiados a las siguientes generaciones y eso tampoco puede ser posible para este conflicto. Ellos consideran refugiado al desplazado y todas las siguientes generaciones, aunque ya no vivan en Palestina o en los países limítrofes.
Se puede dar el caso de que árabes palestinos que felizmente vivan en Chile o en Canadá, totalmente integrados en sus comunidades, para todos los efectos sigan siendo contabilizados como refugiados palestinos, aunque no tengan intención alguna de volver a la tierra de sus bisabuelos.
Pero curiosamente se le olvidó en su exposición la Resolución 242. Esta resolución establecía la necesidad de la retirada de las fuerzas israelíes de los territorios ocupados y el derecho de todos los Estados de la zona a vivir en paz dentro de una fronteras seguras, reconocidas y libres de amenazas o actos de fuerza.
Los árabes palestinos difícilmente cumplirán esta resolución porque no reconocen el Estado de Israel y no están de acuerdo con sus fronteras. Lo paradójico es que ellos no pueden opinar mucho al respecto, puesto que ni siquiera son todavía un estado. Y puesto que no son un estado, tampoco están en disposición de exigir la expulsión de Israel de las NACIONES UNIDAS.
10.- Palestina debe ser reconocida como un estado miembro en la ONU
Lo podrán ser si deciden culminar los Acuerdo de Oslo, aunque sea con más de 20 años de atraso. Creo que no habría ningún impedimento si sus grupos terroristas entregaran las armas, si además hubieran nuevas elecciones y si se crearan los mecanismos necesarios para funcionar como un país democrático. Tendría toda la ayuda de los países árabes, de Israel y también de toda la Comunidad Internacional.
Pero eso no se producirá porque al igual que ya pasó con Arafat, sería el reconocimiento explícito de Israel y de su derecho a ser un Estado judío en Palestina.
Si los países árabes iniciaron este conflicto, creo que es hora de que ellos también pongan los medios para ponerle fin. Ya está bien de tantas mentiras y tanto sufrimiento. Los Acuerdos de Abrahán van en esa línea y espero que sirva igualmente para ayudar a terminar con este doloroso conflicto.
No hay otra forma y de esa manera el “expresidente” (*) Abbas se podrá ir definitivamente a descansar bin en Ramala o en su otra residencia en Jordania y evitar con ello todas estas incorrecciones y mentiras como las que vertió el pasado 15 de mayo en la ONU.
(*) No tengo más remedio que ser un poco irónico. En cualquier lugar del mundo civilizado, cualquier gobernante al finalizar su mandato, convoca elecciones menos la Autoridad Palestina. Por eso parra mí es un expresidente.
Carta abierta a partir del artículo escrito en THE JERUSALEM POST:
Abbas disavows Jewish ties to Temple Mount, compares Israel to Nazis
28/05/2023
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