Para alguien que nunca quiere llevar a término las negociaciones, ni realmente la paz con Israel, con sus palabras ante la Asamblea General de las Naciones Unidas parece querer mostrar a la Comunidad Internacional que nunca a cesado en su empeño para conseguir una verdadera paz y duradera con Israel.
Pero nada más lejos de la realidad y para quienes conocemos un poco el conflicto palestino-israelí, se trata de un nuevo golpe de efecto para sus seguidores.
Lo cierto es que Mahmud Abbas se encuentra cada vez más acorralado y aislado. Su mensaje ya no interesa a casi nadie, porque no es creíble ni para él mismo.
La anterior administración norteamericana de Trump le hizo mucho daño con los Acuerdos de Abrahán y también con los recortes en ayudas. Y aunque la actual administración de Joe Biden está trabajando de una forma muy diferente, la realidad es que cada día lo tiene peor, porque ya no puede esconder por más tiempo que nunca quiso la paz con Israel.
Se ha negociado con los palestinos infinidad de veces de forma directa o indirecta, pero siempre con el mismo final: no, no y no.
Es cierto que en 1993 se consiguieron los acuerdos de Oslo-1 y de Oslo-2, posibilitando con el primer acuerdo la autonomía en Gaza y Jericó, y con el segundo acuerdo ampliarlo a toda Judea y Samaria (para otros Cisjordania) distribuyéndose en zonas A, B y C.
Pero llegado el momento, no fueron capaces de culminar los acuerdos de Oslo con Israel, porque nunca ha estado en su agenda tal cosa. Alimentado inicialmente por el apoyo global de toda la Liga Árabe, los palestinos se sentían con la fuerza suficiente como para doblegar a Israel, pero pasado los años se ha visto que es Israel quién está doblegando uno a uno cada una de las naciones árabes y musulmanas, muy a pesar de los palestinos.
La Autoridad Palestina y Mahmud Abbas en particular se encuentra en un callejón sin salida y cada vez con menos apoyos internacionales. En España tenemos una frase para definir esta situación: "el cuento de la buena pipa" (que consiste en repetir la misma historia, una y otra vez hasta aburrir a todo aquel que la está escuchando). Y justamente la narrativa palestina es precisamente "el cuento de la buena pipa".
La situación no puede seguir así por más tiempo. No es creíble pensar que no hay solución a este conflicto. Lo cierto es que de ninguna manera se conseguirá la paz, si Israel no toma la iniciativa. Para ello se necesita nuevo enfoque, una nueva realidad, un sincero deseo para terminar con esta situación y poder vivir juntos de nuevo en paz, como lo fue a finales del siglo XIX y principios del XX.
El nuevo gobierno formado hace pocos meses, parece que trabaja en ese sentido, realizando reuniones al más alto nivel como la mantenida con el Rey Abdullah II de Jordania, con el presidente Abdel Fatah al-Sisi de Egipto, con Joe Biden presidente de los Estados Unidos y también con el propio presidente Mahmud Abbas de la Autoridad Palestina en Judea y Samaria.
En ellas se muestran un nuevo enfoque a las relaciones entre gobiernos, propiciando nuevos acuerdos y alianzas como es el caso de Jordania, a quien se les ha provisto de más capacidad de agua para poder afrontar mejor la crisis que están sufriendo a raíz de la pandemia del COVID-19; o con Egipto donde también se sigue avanzando en seguridad, sistemas de riegos para la agricultura y en un mayor diálogo para avanzar juntos contra el terrorismo de Hamas y de otros grupos terroristas islamistas similares en Gaza así cómo en el Sinaí; también con Joe Biden en la Casa Blanca para confirmar y seguramente ampliar las alianzas, para así afrontar mejor los problemas geopolíticos en Oriente Medio y particularmente los ocasionados por Irán.
Pero de todo ello, probablemente la más importa fue la reunión de Benny Gantz (Ministro de Defensa israelí) con Mahmud Abbas de la Autoridad Palestina de Judea y Samaria. Estando las relaciones muertas en materia de negociación por más de diez años, Israel se ofreció para ayudar a la economía palestina y así se hizo poniendo en marcha un préstamo de 500 millones de dólares. Es todo un gesto, para mostrar que se quiere avanzar juntos de una manera diferente.
Y esta próxima semana habrá otra nueva reunión similar de Abbas con otros 2 ministros israelíes. Son los Ministerios de Salud y de Cooperación Regional. Ambos del partido MERETZ (partido de izquierda en el Gobierno). Uno de ellos es de origen árabe, que seguramente facilitará el diálogo. Seguirán trabajando en materias importantes de cooperación con los árabes palestinos gobernados por Abbas.
Ante estos cambios de política, no se puede recibir como respuesta la amenaza de un año para volver a las líneas de antes de la Guerra de los Seis Días de 1967. Realmente no es posible hacer tal cosa, porque no serían líneas seguras para Israel. Además, la realidad actual ya no es la que había en 1967.
Abbas habla de "territorios ocupados" y ese término es totalmente erróneo, porque sólo son "territorios en disputa". Y para explicarlo un poco, daremos unas breves pinceladas a la historia reciente:
- Declaración de Balfour de 1917. El gobierno del Reino Unido escribe a los sionistas ingleses que tienen la ayuda necesaria para el establecimiento de un Hogar Nacional en su tierra ancestral, es decir, en lo que conocemos ahora como Palestina.
- La Liga de las Naciones hace suya la Declaración Balfour y el compromiso se extiende a todas las naciones de La Liga de Naciones.
- Conferencia de San Remo en 1920, donde las potencias ganadoras de la Primera Guerra Mundial confirman el derecho de los judíos a establecerse como nación en Palestina.
- Mandato para Palestina, fue un estatuto aprobado por la Liga de las Naciones en 1922, dando derechos políticos exclusivos a los judíos, en toda la tierra entre el río Jordán y el Mar Mediterráneo. Derechos sin excluir otros derechos religiosos (pero no derechos políticos) que pudieran tener los habitantes no judíos que vivieran entonces de la zona .
- Las Naciones Unidas como heredera de la Liga de las Naciones hace suya todos los acuerdos con los judíos en Palestina, así como el Mandato para Palestina.
- Resolución de la ONU en 1947 para la partición de la tierra entre judíos y árabes, porque no encontraba otra salida en ese momento para conseguir la paz. Solución rechazada por los árabes, porque sólo buscaban la expulsión total de los judíos en Palestina.
- En la Guerra de los seis días de 1967, Israel conquistó las tierras anteriormente invadidas ilegalmente por Jordania y Egipto en 1948, junto con algunas más a Siria y Egipto. Las tierras en cuestión son las de Cisjordania (Judea y Samaria) y Gaza. Al finalizar la guerra, fue la primera vez que Israel ocuparía toda la tierra prevista para ellos en el Mandato para Palestina de 1922.
- Resolución de la ONU 242 para fronteras seguras. Tras la Guerra de los Seis Días, se le pide a Israel retirarse de algunas de las tierras conquistadas (no de todas ellas), para conseguir mantener la paz, pero no se pude llegar a ningún acuerdo en esos momentos.
- Hasta ese momento nunca los árabes palestinos tuvieron tierra propia alguna en Palestina. En ningún caso declararon su independencia, como si hicieron los Israelíes en su parte de Palestina, el 15 de mayo de 1948. Luego no se puede decir "territorios ocupados" a aquellos territorios que nunca fueron suyos. En todo caso y siendo benévolos, se debería hablar de "territorios en disputa".
Además de las guerras ya vividas, existe otro tipo de lucha mucho más sutil, pero no menos dañino: la lucha la mediática. Esta otra lucha ha estado presente desde siempre con un relato erróneo e interesado, que ha ido calando de pleno en nuestras sociedades. De ahí que se piense en "territorios ocupados" de forma automática sin saber la realidad histórica detrás de ella.
La paz debe ser posible y pedimos a Dios para que dé sabiduría a todos y para que puedan terminar con toda esta locura. Los pueblos merecen poder vivir y desarrollar sus vidas entre sí en libertad y respeto.
Con un 80% de la población de Judea y Samaria contra Mahmud Abbas, no caben las amenazas. Sólo cabe cambiar para evolucionar.
Lo que Abbas sí podría hacer es comunicar a la misma Comunidad Internacional que está dispuesto a realizar negociaciones directas con sus vecinos y hermanos de Israel, para conseguir una verdadera paz y duradera antes de un año. Eso sí que sería una "amenaza" para todos los que dicen que quieren ayudar y no hacen nada por la paz.
Comentarios personales.
02/10/2021
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