Foto Kremlin
Beni Cotler
Se están cumpliendo los siete años de la Guerra Civil en Siria, que a pesar de los resultados en pérdidas humanas demuestran que parecería que, como dice el tango, “al Mundo nada le importa”.
Ya contamos con cerca de medio millón de muertos, miles de detenidos en cárceles en forma inhumana que incluye torturas según fotos que se han filtrado, y millones de desplazados.
Es conocido que actualmente en Siria se encuentran instalados Rusia e Irán, como colaboradores del régimen de Assad, y dado el tiempo transcurrido todo hace suponer que ambos regímenes llegaron para quedarse.
Hace días un dron iraní fue disparado desde Siria hacia el territorio israelí, con la correspondiente respuesta de Israel y la caída de un avión israelí dentro de la Galilea sin ocasionar víctimas humanas para Israel.
El Mundo puede ser que ignore que Israel ha recibido en la frontera Norte más de 1000 sirios heridos en la guerra y fueron atendidos en hospitales sionistas.
Desde el último domingo (18/2) se han recrudecido los ataques y las fuerzas sirias y rusas han atacado poblaciones civiles con un saldo de más de 300 muertos y decenas de heridos, estos últimos de difícil atención porque varios hospitales han quedado destruidos.
Quiero destacar que cuando comenzó esta guerra hubo varios países mediadores sin éxito, y en este momento el Mundo parece preocupado pero sin ánimo de intervenir en este atentado aberrante a los derechos humanos, ya que en los medios televisivos advierten que las imágenes pueden afectar al ser humano…
Falta de todo, medicinas, alimentos, frazadas, etcétera… pero lo que más falta es vergüenza por parte de Assad. Putin y Rohani.
¡Los estrategas mundiales deben de alguna forma ponerle el cascabel al gato! Amén
22/02/2018 en AURORA DIGITAL
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