El primer ministro, Biniamín Netanyahu, acusó al presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, de tener un "oído selectivo" por afirmar en la Kneset (Parlamento) que un israelí emplea cuatro veces más agua que un palestino. La alocución de Schulz ante el plenario levantó críticas entre los sectores más nacionalistas y llevó a varios diputados a abandonar la sala, incluido el titular de Economía, y líder del partido religioso nacional "Habait Hayehudí", Naftalí Bennett.
"El fallo en estos comentarios es lo que denomino 'oído selectivo', que desafortunadamente se ha convertido en el legado de muchos grupos en Europa", declaró Netanyahu en el Parlamento más tarde.
En su alocución previa en alemán, Schulz se refirió a la situación que viven los palestinos.
"Una de las preguntas que esos jóvenes (palestinos) me hizo y que consideré conmovedora, fue esta: ¿Cómo puede ser que un israelí esté autorizado a usar 70 litros por día, pero un palestino sólo 17?", interpeló Schulz a los diputados israelíes.
Netanyahu negó esas cifras y señaló que "de acuerdo a las estadísticas que recibimos de la Autoridad Palestina, incluidos los comunicados oficiales de la Autoridad Palestina de Agua y nuestros datos, ese dato no es correcto, sino que es significativamente menor".
El jefe del Gobierno abundó en que el presidente del Parlamento Europeo "dijo honestamente 'no lo he corroborado', pero eso no impidió que reiterara (sus acusaciones) a continuación. Ellos oyen, no comprueban, lanzan (acusaciones). Lo adecuado sería que lo comprobara".
"Las acusaciones sin base llevan a los israelíes a ignorar toda crítica. Cuando esos comentarios se repiten sin ser verificados, la gente acaba cerrando los oídos a ataques salvajes contra el Estado de Israel", aseveró Netanyahu.
Según los datos de la Autoridad de Agua la diferencia del consumo de los israelíes en 2009 era de 1.44 veces más que los palestinos y no 4.42 veces como señalaba Schultz. Debiéndose tener en cuenta, además, que el 33 por ciento del agua que Israel entrega para satisfacer la demanda de los palestinos se pierde por filtraciones en la infraestructura de sus territorios o es lisa y llanamente robada.
Schulz se refirió escuetamente a la dura contestación recibida en la Kneset en un encuentro con el jefe del Estado, Shimón Peres, al señalar que entre socios hay terreno para la discrepancia.
"La posición de la Unión Europea no es siempre cómoda y sencilla, pero a veces, entre amigos hay diferencias de opinión", señaló. EFE y Aurora.
Publicado el 12/02/2014 en AURORA DIGITAL.
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