Un tribunal saudita sentenció a un ciudadano jordano a nueve años de cárcel tras ser condenado de espionaje en favor de Israel, según el diario panárabe Al Hayat, editado en Londres. La corte penal de Riad le añadió la pena de 80 latigazos por consumir estupefacientes y mantener una "relación ilícita" con una mujer extranjera en el ultraconservador reino, y apuntó que tras cumplir el castigo será deportado.
El juez afirmó que el jordano estaba en contacto con funcionarios israelíes, entre ellos el primer ministro, Biniamín Netanyahu, y un alto oficial del servicio de inteligencia.
La corte señaló que el hombre recibió una suma de dinero y aceptó viajar a Israel para colaborar con los servicios secretos.
El condenado se encuentra detenido desde el año 2010, por lo que ese tiempo se le descontará de la condena, que es apelable.
Arabia Saudita no reconoce a Israel; pero Jordania tiene relaciones con el Estado judío.
Se trata de la primera vez que los tribunales sauditas condenan a una persona por presuntamente colaborar con los servicios secretos israelíes.
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